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Es un momento clave en la vida de cualquier trabajador, más para aquel que recién está ingresando en el mercado laboral. La entrevista laboral es la etapa final, posterior al llenado de formularios y envío de currículos.


La entrevista de trabajo es la típica situación donde siempre se quiere dejar una buena impresión a como dé lugar. Para esto, debes prepararte bien, conocer acerca de la competencia, tener un comportamiento profesional y responder con altura a las preguntas que te realicen.

¿Qué dicen sobre esto los que saben?

1. Familiarízate con el lugar de trabajo. Para empezar, una buena preparación de la entrevista: conocer la página web de la empresa, saber detalles acerca de ella –si sale en los medios, por ejemplo-, tener en cuenta el perfil de los que allí laboran.

2. Saber sobre la competencia. Asegúrate de saber todo acerca de las fortalezas y debilidades de la competencia principal de tu posible empleador. Tendrás que tener un buen conocimiento del ecosistema del rubro al que te dedicas. Los reclutadores saben las amenazas y oportunidades que enfrentan y probablemente esperan que tú tengas cierta comprensión de donde están teniendo éxito y dónde se están quedando atrás.

3. Ofrece ideas interesantes. Debes tener planeado algo genial, bien pensado, con ideas. Esto dependerá del tipo de trabajo al que accedas, pero será siempre bueno que dejes ver tu proactividad.

4. Muestra tu mejor trabajo. Imelda Salajan, especialista en OnTrackMedia Indonesia, dice que es importante preparar un portafolio con tu mejor trabajo. Esto para el caso que amerite. Hay muchas entrevistas de trabajo en la que se solicita que el aspirante muestra algo de su talento.

5. Prepárate como un profesional. Pensar en lo que te pueden pedir y preparar tus respuestas de antemano es crucial. Es muy bueno impresionar al entrevistador con tus conocimientos y habilidades.

6. Preguntar al entrevistador. El reclutador desconfiará de una persona que no tiene nada de iniciativa en una entrevista. Te medirá por tus respuestas pero también por tus preguntas.

7. No olvidar los elementos de cortesía. Esto es, llegar puntual como primerísima condición. Incluso, antes de tiempo. Cuando saludes, hazlo con firmeza, mirando a la cara, pero siempre con sencillez y naturalidad.

8. También vigila el lenguaje no verbal y los gestos confusos, contestando solo a lo que te pregunte, y sin jamás emitir una crítica hacia tu actual o anterior empresa, ni hacia tus jefes o compañeros en ella. Tampoco entres en polémicas; y al terminar el encuentro, procura recordar todos tus puntos fuertes al entrevistador.

Fuente: Ijnet.org, DonEmpleo.com y EntrevistadeTrabajo.info, Universia

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